El Real Madrid logró una espectacular victoria ante el Partizán de Belgrado (89-91) en un duelo cargado de emoción y tensión hasta el último segundo. El conjunto blanco, dirigido por Chus Mateo, cerró la fase regular de la Euroliga con una sexta victoria consecutiva, a la espera de los resultados del viernes para conocer su posición final en la clasificación (5.º, 6.º o 7.º puesto).
Inicio firme y dominio inicial
El Real Madrid salió sin complejos en el Belgrado Arena, imponiendo un parcial de 0-7 gracias a una defensa intensa y al dominio en la pintura de Walter Tavares. Sin embargo, el Partizán reaccionó con fuerza, liderado por Bonga y Davies, para cerrar el primer cuarto con un ajustado 24-22.
Musa y Campazzo sostienen al Madrid
En el segundo cuarto, Dzanan Musa tomó el protagonismo ofensivo con 12 puntos, bien secundado por Serge Ibaka, quien firmó un sólido doble-doble (11 puntos y 10 rebotes). A pesar de los altibajos, el Real Madrid logró irse al descanso con una ligera ventaja (46-48), gracias a la dirección de Campazzo y un triple clave de Deck.
El Partizán toma ventaja, pero el Madrid no se rinde
Tras el descanso, el conjunto de Zeljko Obradovic elevó el ritmo y logró abrir brecha (74-65), aprovechando las pérdidas del Madrid y su eficacia ofensiva con Jones y Davies. Pero el equipo blanco no bajó los brazos.
Tavares decide el partido con una canasta sobre la bocina
En los tres últimos minutos, el Real Madrid protagonizó una remontada memorable. Llull, con un triple, encendió la mecha. Campazzo, el jugador más valorado del encuentro, sumó puntos clave y robos decisivos. Hezonja y Tavares, que incluso robó un balón tirándose al suelo, completaron la gesta. A falta de 2 segundos, y con empate en el marcador, Chus Mateo diseñó la jugada definitiva: Tavares anotó sobre la bocina para sellar el triunfo (89-91) y silenciar el Belgrado Arena.
